Armonización: Vinos del Mundo y platos locales

«Ahí estaba la arena. Era todo playa», dice María Elena Marfetán como si lo hubiera visto, como si lo estuviera viendo. Estamos en la sala del restaurante Lo de Tere, en lo que fue, allá por el año 1940, el jardín de una de las primeras casas de la península de Punta del Este. Hoy esa casa es el lugar donde la reconocida chef puntaesteña manifiesta su impronta personal en la cocina.

Lo de Tere es un restaurante clásico que Marfetán, poco a poco, le está dando su enfoque, y en él plantea lo que le gusta hacer revalorizando el producto local y de estación. Por ello, para esta armonización con Vinos del Mundo utilizó camarón de la laguna Garzón y hongos de la zona recogidos por ella misma. Una creación sorprendente: bombón de camarón con consomé de hongos de estación.

Fiel al enigma de Alma Negra

Para esta preparación plena de sabor y sensaciones sutiles de mar y tierra, de retrogusto prolongado y estética visual que resalta la pasión de la chef, elegimos un vino blanco misterioso, con carácter y personalidad. Alma Negra Blanco 2015, Domaine Alma Negra de Ernesto Catena Vineyards, Mendoza, Argentina.

El corte de Alma Negra Blanco 2015 es un secreto no velado, fiel al enigma que caracteriza a Alma Negra. Pero sabemos que es un vino que fermentó en barricas de roble francés y se crió sobre sus propias borras casi un año, lo que le confiere estructura y untuosidad en boca. Es fresco e intenso, devela sabores suaves a fruta blanca y frutos secos, de buena persistencia y muy apropiado para la combinación de mar y tierra de la chef. Es un vino que estimula a descubrir sus secretos e invita a prolongar la sobremesa.

Fotos y texto: Sergio Gómez