La pesca artesanal es un ícono de Punta del Diablo, alcanza con ver las coloridas barcas que reposan a lo largo de la playa de Los Pescadores, ubicada en el centro del balneario. Actualmente, este tipo de pesca (artesanal) se practica en muy pocos lugares en el mundo, lo que la hace particularmente atractiva y única. Esta actividad es de origen prehistórico y su filosofía y ritmo no acompañan para nada al ritmo de vida vertiginoso de los días actuales.
El método
La rutina se desarrolla de la siguiente manera: muy temprano en la mañana, las barcas ingresan al mar en busca de la pesca del día, y se pierden más allá del horizonte. Unas pocas horas antes del atardecer, los pescadores emprenden su regreso con un motín envidiable. Luego de finalizada la hazaña en el mar, los pescadores emplean una técnica totalmente manual y que los involucra a todos, para arrastrar las barcas desde la orilla hasta la arena. Una vez amarradas, los pescadores limpian su pesca y la exponen, robándose la atención de los curiosos turistas. Entre sus productos se pueden ver desde grandes corvinas negras hasta pequeños cazones, dos clásicos de la costa rochense.
Por Punta del Diablo
Ya saben, si están por Punta del Diablo, acérquense a presenciar cómo trabajan estos hombres de altamar, y luego quizás puedan darse un gusto y probar los cazones a la milanesa o la corvina a la parrilla, en alguno de los restaurantes del balneario.